A Diego de silua Velázquez, ayuda de cámara de su magestad, quatro mill ciento y quarenta reales y treinta y dos maravedís, que balen ciento y quarenta mill setecientos y noventa y dos maravedís, por los mismos que importaron los reparos que su magestad, Dios le guarde, mandó al Marqués de Malpica, superyntendente de las obras Reales, se hiçiesen en la cassa del thesoro en la ventana de la pieza grande, atajos y suelos que se hizieron en ella. todo a tasación de Pedro de la peña, aparejador de las obras Reales, ynclusos en la dicha cantidad mill y seisçientos y ochenta Reales que ynportaron los jornales de los oficiales y peones que trauajaron en los dichos reparos quatro semanas, desde treinta de agosto del dicho año de mill y seisçientos y çinquenta y cinco hasta veinte y siete de septiembre del, como más por menor consta de la libranza de los dichos Veedor y Contador y maestro mayor fecha en veinte y cinco del dicho mes de septiembre del dicho año de mill y seiscientos y cinquenta y cinco.

Los quales dichos maravedís se pagaron al dicho Diego de silba Velázquez con Ynteruención del dicho Veedor y conttador de que otorgó carta de pago en esta dicha villa en seis de otubre del dicho año ante Domingo meléndez, esscribano.