CEEH Centro de Estudios Europa Hispánica

Johannes Gebhardt recibe la beca I Tatti / Museo Nacional del Prado

Johannes Gebhardt es investigador asociado en el Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Leipzig, donde se doctoró en 2018. Sus investigaciones se centran en el arte de la Edad Moderna desde una perspectiva transcultural, con especial énfasis en las imágenes de culto, la teoría del arte, la materialidad y los líquidos. Gebhardt es autor del libro Apparitio Sacri–Occultatio Operis. Zeigen und Verbergen von Kultbildern in Italien und Spanien (1600–1700), la primera investigación sistemática sobre los altares móviles, artefactos muy populares en la época para colocar imágenes de culto. Ha recibido becas de la Bibliotheca Hertziana (Roma) y la Gerda Henkel Stiftung (Düsseldorf). Como nuevo becario 2022-2023 I Tatti / Museo Nacional del Prado, Gebhardt pasará el primer semestre (de septiembre a diciembre) en Madrid gracias al apoyo del CEEH, y el segundo semestre (de enero a junio) en Florencia.

Desde los albores de la cristiandad, la sangre ha desempeñado un papel fundamental en el simbolismo y la práctica devocional. Los fluidos corporales y la religión continúan estrechamente ligados, sobre todo en la Italia meridional, como ha demostrado recientemente la pandemia del COVID-19. En diciembre de 2020 no se produjo la milagrosa licuefacción de la famosa reliquia de la sangre de san Genaro, venerada en la Capilla del Tesoro de Nápoles, un negro augurio para los napolitanos. Durante el siglo XVII, la popularidad de la sangre –e incluso la fijación con ella– en Nápoles y más allá encontró una poderosa vía de expresión en el arte, gracias en cierta medida al aumento de los intercambios culturales entre Italia y el mundo hispano. Los pintores y los escultores abrieron nuevos caminos en la representación de la sangre, y el líquido corporal se convirtió en sí mismo en un topos en la teoría del arte como metáfora del virtuosismo artístico. Este proyecto, Sangre. Alcance de la liminalidad en el arte italiano e hispano en la Edad Moderna, demuestra la importancia de la sangre para la pintura, la escultura, la escritura y el ritual a la luz de los actuales discursos sobre la liminaridad, la materialidad y los intercambios culturales entre Italia, España y el Nuevo Mundo. A través de un análisis detallado y crítico del papel de la sangre en distintos soportes, con su trabajo mostrará no sólo la diversidad material y la complejidad simbólica en el empleo de la sangre en el arte, sino la relevancia sociocultural de este fluido en el contexto de la fe.

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